jueves, 20 de noviembre de 2008

EN FRANCÈS TAMBÉ, SI US PLAU

Hace mucho tiempo que no escribo en el blog, y no es por falta de ganas, sino que entre las clases, las traducciones y el nuevo blog de catalán, me faltan horas para todo.

Pero hoy no he podido evitar escribir algo. Navegando por la Web me he encontrado con un artículo de Nathalie Bittoun-Debruyne titulado "En francès també, si us plau" que resume en tres páginas la situación de los profesores de francés en los institutos de secundaria de Cataluña. No es reciente, pero, por desgracia, la situación no ha variado mucho.

domingo, 12 de octubre de 2008

NACEN DOS NUEVOS BLOGS


Llevo todo el fin de semana enfrascada en la creación de dos nuevos blogs: uno de francés, que estamos creando conjuntamente con Silvia, la otra profesora de francés del centro, y uno de catalán. Supongo que mantenerlos al día me restará tiempo para poder escribir en mi blog personal, pero tengo ganas de ver cómo funciona esta herramienta con los chavales. ¡Espero que los enganche! Ya os contaré cómo va.

sábado, 4 de octubre de 2008

¿EL FRANCÉS DE CAPA CAÍDA?

Pensaba que el francés estaba de capa caída y que los alumnos de secundaria preferían realizar otra optativas (tan variopintas como malabarismos o canto coral) en lugar de estudiar una segunda lengua extranjera. Mi sorpresa esta última semana ha sido mayúscula: tanto en los centros de secundaria públicos como en los concertados, muchos niños no pueden estudiar francés porque el número de plazas es limitado. En la mayoría de los casos la demanda duplica la oferta y al pesar de los alumnos se une el malestar de los padres. Lo digo con conocimiento de causa, tras oír ayer mismo las quejas de una madre que tiene a su hijo matriculado en una escuela concertada. ¿Qué está ocurriendo? ¿Cómo se justifica esto? ¿Por qué luego muchos profesores de francés se ven obligados a completar su horario impartiendo asignaturas que nada tienen que ver con lo que han estudiado? ¿Por qué no contar con dos profesores para impartir esta asignatura? ¿Nos vamos a quedar de brazos cruzados los profes de francés? La verdad es que no tengo palabras para expresar mi indignación, así es que, para que os hagáis una idea de cómo me siento, aquí os dejo una muestra de lo más ilustrativa:


PRIMERAS SENSACIONES


Últimamente ando muy liada y es que ponerse al día en el instituto lleva su tiempo. La "rentrée" ha sido, en cierto modo, como una vuelta a casa, pese a que solo había impartido clases durante poco más de un mes en ese instituto. Pero nada más cruzar la puerta algunos de mis alumnos del año pasado me recibieron con un efusivo: "Vicky, ¿vas a ser tu este año nuestra profe de francés? ¡Qué bien!". Y eso a una que, como bien sabéis, aún anda en pañales, le llena de satisfacción.

Los alumnos son "de buena pasta". Claro está que, como en todas partes, algunos dan más guerra que otros, pero no me puedo quejar en absoluto. Los más pequeños son unos terremotos y llevo días luchando para que a la hora de participar en clase no levanten el culo de la silla y se pongan a gritar "Yo, yo, Vicky, yo lo sé". Con el tiempo y una caña...

También me he reencontrado con algunos de los profesores del año pasado y he conocido a mi compañera del departamento de francés. No os equivocáis si estáis pensando que es otra apasionada de este idioma. Siento que ha habido muy buen "feeling" y que aprenderé mucho de ella. A estas alturas ya estamos viendo cómo organizar alguna salida a Francia con los alumnos, cómo montar un blog... En fin, todo lo que esté a nuestro alcance para que los alumnos disfruten con las clases y aprendan lo máximo posible.

Al trabajo en el instituto se suman, tras un par de meses de inactividad, un par de proyectos lexicográficos y un curso telemático de lo más interesante sobre educación emocional. Entre unas cosas y otras, apenas me queda tiempo para aburrirme. Pero los que me conocen ya saben que soy una persona con muchas inquietudes y que tanta actividad me llena de vida y de alegría.

lunes, 22 de septiembre de 2008

COMIENZA EL CURSO... ¡EL 23 DE SEPTIEMBRE!


Sí, sí, habéis leído bien. Pese a que todos los alumnos empezaron las clases el pasado día 15, ¡yo me incorporaré mañana! ¡Bien! ¡He conseguido un destino para todo el año! Se trata de una sustitución de las denominadas "de difícil cobertura": media jornada y en un pueblo no precisamente bien comunicado, pero estoy dispuesta a caminar la media hora que hace falta para llegar al instituto desde la estación de tren si pierdo el enlace con el autobús (y es que solo pasa uno cada hora). Estoy muy contenta porque, además, ya conozco el centro, a algunos alumnos y a muchos de mis compañeros. ¡Sí, sí, solo he pasado por dos institutos y he tenido la suerte de volver a caer en uno de ellos! Digo la suerte porque en los dos estuve la mar de a gusto, claro está.

En fin, como era de imaginar, no solo impartiré clases de francés (y digo yo, ¿por decreto no tienen que ofertar los centros 18 horas de segunda lengua extranjera?). Esta vez ha habido suerte: tendré un grupo de catalán de 1º de ESO. Y ahora digo suerte porque sé de profesoras de francés a las que les ha tocado impartir clases de matemáticas e incluso de italiano (¿se creerán que por saber una lengua románica las dominas todas?). Según me han informado, de este grupo de catalán seré, además, tutora. Tengo ganas de estrenarme en ello, si bien me impone cierto respeto. Espero que los cursos de Educación emocional y de Promoción de la autoestima en los que me he matriculado este trimestre me resulten de gran utilidad para las tutorías.

También me ha comentado el director que los grupos de francés que tendré son de 1º y 2º de ESO (si mi memoria no falla, diría que los dos son principiantes). Espero que el trabajo realizado con Cristina a lo largo de este verano y enfocado concretamente a este nivel guste a mis nuevos alumnos. (Si queréis ver una muestra de ese trabajo, basta con que echéis un vistazo en la entrada "Vicky Cristina Barcelona", donde he incluido los enlaces del material que hemos publicado en la web para que otros colegas puedan utilizarlo igualmente si lo desean.)

Así es que, como veis, este año me toca estar con los más "peques" del instituto. Me siento feliz. ¡Deseadme suerte!

martes, 16 de septiembre de 2008

¡TAMPOCO SOY UN BICHO TAN RARO!


Aunque se me había llegado a pasar por la cabeza, es verdad, no soy tan bicho raro como creía. Y para muestra, un botón. Aquí os dejo un vídeo para que lo comprobéis: "Professeur de français : un métier, une passion".

viernes, 5 de septiembre de 2008

A LA ESPERA DE UN DESTINO

Vagi on vagi... us trobaré a faltar!

Compañeros del IES La Llauna (Badalona)

¡Y es que, entre otras cosas, no os podéis imaginar el buen rollo que me transmitía oír las carcajadas de Lili desde la otra punta del pasillo!

viernes, 29 de agosto de 2008

VICKY CRISTINA BARCELONA


Vicky Cristina Barcelona es el título de la última película de Woody Allen, pero también es el que resume parte de lo que ha sido, personalmente, este verano. Cristina es una gran —aunque “chiquitaja” como yo— amiga de Barcelona a quien conocí el primer día de universidad y a quien, me consta, el francés le apasiona tanto como a mí. Desde entonces hemos compartido muchas cosas juntas y llevado una carrera profesional bastante paralela, si bien ella ha descubierto antes que yo lo de impartir clases de francés en secundaria, con lo cual, dicho sea de paso, aprendo mucho de sus experiencias. Este verano decidimos crear un dossier de actividades para trabajar con los alumnos que descubrieran el francés por primera vez. ¡Y creo que, pese a ser una ardua tarea, las dos nos lo hemos pasado en grande!

Con Cris compartimos, además de la pasión por el francés, la idea de introducir las TIC en el aula. Así es que, aprovechando todo lo que sabíamos y habíamos aprendido en algunos cursos, este verano hemos creado unas cuantas páginas con actividades para que los alumnos (especialmente los de nivel A1 y A2, es decir, los de primer ciclo) trabajen con los ordenadores en el aula multimedia o en sus casas. ¿Os apetece echarles un vistazo o incluso practicar un poco? Aquí tenéis:

Ahora, antes de que empiece el curso (si bien yo, como sustituta, aún no sé qué me deparará el futuro), estamos dando los últimos retoques a nuestro trabajo. Estamos satisfechas con el esfuerzo y esperamos que a los alumnos les gusten las actividades y aprendan mucho con ellas. Seguro que a lo largo del curso Cris y yo vamos hablando para ver qué está funcionando y qué no, y así aprender de nuestros aciertos y nuestros errores.

¡Y, este verano de 2008, este ha sido mi Vicky Cristina Barcelona particular!

MI PEQUEÑA BIBLIOTECA

Yo creo en la intuición, no sé muy bien si femenina, pero en la intuición. Cuando acabé la EGB, a finales de los 80, me dio por recopilar libros de texto de francés, ya no solo los que yo había utilizado, sino también los empleados por otros chavales de mi generación. Algo dentro de mí en aquellos tiempos debía de entrever que al final me acabaría dedicando a esto... :) Llevo tiempo buscando esa caja de libros en el granero de la casa de mis abuelos en el pueblo, pero sin éxito. Es una lástima, pues para mí eran un bien muy preciado.

En los varios traslados de piso realizados, de lo que nunca me llegué a deshacer fue de un libro o revista escritos en francés, cuando sí, aunque muy a mi pesar, tuve que ir dejando atrás otros libros por cuestiones de espacio. En los últimos tiempos, mi pequeña biblioteca ―la verdad es que más pequeña de lo que me gustaría― no ha dejado de asestarse de libros muy variados en varios idiomas (novelas, métodos de idiomas, ensayos de traducción, libros de pedagogía y psicología, etc.) que acompañan a otros tantos en los que he participado (ya sea como traductora, correctora, redactora o asesora).

A veces me considero compradora compulsiva de libros. ¡Me han gustado siempre tanto! Hojearlos, leerlos, disfrutarlos... Muchas veces los descubro en las bibliotecas públicas y, al final, me acaban gustando tanto que no puedo reprimir comprarlos. Esta misma mañana me ha pasado. Así es que acabo de llegar a casa con cuatro libros más, a los que he de buscar un hueco en esta magnífica estantería que mi amiga Pili (¡mi gran Pilitrus!) me diseñó antes de volverse al pueblo. Con todos esos libros, mi pequeña biblioteca encierra en su interior un pequeño mundo que considero el rincón favorito de mi casa.

jueves, 21 de agosto de 2008

JORNADAS PARA EL IMPULSO DE LA LENGUA FRANCESA

El próximo 5 de septiembre, por la mañana, se celebra en el Instituto Francés de Barcelona la II Jornada d'Impuls a l'ús de la llengua francesa a Catalunya*. La jornada va dirigida a profesores de francés, profesores de áreas no lingüísticas en francés, miembros de equipos directivos, asesores y coordinadores LIC. Tal vez a alguno de vosotros le gustaría asistir. ¿Nos vemos por allí? (Inscripción).

*L'impuls a l'ús de la llengua francesa és un grup de treball del Servei de Llengües per l'assessorament a la incorporació de la llengua francesa com a llengua vehicular de continguts curriculars amb metodologies específiques en centres de Catalunya que adopten aquesta via en el seu projecte lingüístic de centre.


(Más información, Braz, A., Pour une réflexion sur l'enseignement bilingue, Consejería de Educación de Cantabria, 2007).

jueves, 31 de julio de 2008

CLIN D'ŒIL

CITA CÉLEBRE


Dis-moi et j'oublie. Enseigne-moi et je me souviens.
Fais-moi participer et j'apprends.

(Benjamin Franklin)

miércoles, 30 de julio de 2008

INTERAVENTURE

En mi época de adolescente siempre pensé que "de mayor" me gustaría colaborar en la organización de esos intercambios lingüísticos entre Huesca y Tarbes y acompañar a los chavales en sus experiencias (por entonces recuerdo que iban con nosotros dos señores, intuyo que profesores, aunque solo los veíamos el primer y el último día). Sin embargo, con el paso de los años, esos intercambios dejaron de organizarse.

Curiosamente, en el 2004, dos miembros de una asociación cultural de Huesca presentaron un proyecto al Ayuntamiento para seguir fomentando el hermanamiento entre ambas ciudades. Así nació Interaventure: una especie de campamentos que se celebran un año en Huesca y otro en Tarbes, y que reúnen a 40 adolescentes de uno y otro lado de la frontera.


¿Y qué tengo yo que ver con todo esto? Pues que, una vez más, de mayor, mi sueño se hizo realidad (¡qué bonito es soñar!). Me propusieron acompañar al grupo de monitores titulados. Parece ser que el hecho de que hubiera una intérprete tranquilizaba mucho a las familias francesas, así es que no me lo pensé dos veces. Disfruté tanto o más que los propios chavales (con algunos de los cuales aún me sigo escribiendo) y me impliqué como una monitora más. Obviamente repetí la experiencia. A esos dos veranos, a mis compañeros de fatigas y largas noches sin apenas dormir esos días (¡Jordi, si supieras cuánto aprendí de ti para mis clases!), a Chus y José Miguel (los "pensadores" del proyecto), pero sobre todo a todos esos jóvenes de los campamentos, les debo que me hicieran descubrir hacia dónde quería reorientar mi carrera profesional: la enseñanza a adolescentes.

Interaventure 2006 (juegos tradicionales aragoneses)

OH, LA VACHE !


De momento, y mientras caigan en mis manos proyectos interesantes, sigo combinando el trabajo de traductora con el de profesora sustituta. En los últimos años me he especializado en un ámbito que me apasiona: la edición de diccionarios bilingües. Me encuentro en estos momentos finalizando un proyecto de un diccionario de argot y, al editar la palabra "vache", me ha venido a la memoria un recuerdo de la adolescencia que tiene que ver con mis primeras experiencias como estudiante de francés.

Huesca, mi ciudad natal, está hermanada con la ciudad francesa de Tarbes (Midi-Pyrénées). Cuando despertó en mí la pasión por la lengua francesa y todo lo que tuviera que ver con esta cultura, los ayuntamientos de ambas ciudades organizaban unos intercambios lingüísticos durante el verano: primero los oscenses, adolescentes todos, pasábamos quince días en casa de familias francesas, y luego los chicos franceses pasaban quince días en nuestras casas. Lo ideal (visto desde la distancia, claro está) era que te tocara en una familia en la que no tuvieran ni idea de español (o al menos eso te dijeran el primer día), porque tenías que espabilarte como fuera.

Allí me encontraba yo, fuera de las clases (por entonces había estudiado francés durante tres años en la EGB y un año en el instituto), dispuesta a poner en práctica todo lo que había aprendido. Mientras nos dirigíamos a la casa (un HLM muy "a la francesa", con moqueta y perro incluidos), iba yo calladita en el asiento trasero del coche tratando de entender la conversación que mantenía la familia y respondiendo tímidamente a lo que entendía de sus preguntas. En una conversación sin trascendencia de la cual apenas pillé unas cuantas palabras pero imaginé el resto (había que ir a comprar el pan), el padre profirió un "Oh, la vache!" (expresión familiar que bien podría traducirse por "¡jo!" u "¡ostras!"). Todavía recuerdo sus carcajadas cuando me vio a mí, con cara de panoli, tratando de descubrir dónde narices estaba "la vaca".

domingo, 13 de julio de 2008

TAN TRISTE COMO CIERTO

Extraído de la crónica “Servidor de rebajas", de Manuel Rodríguez Rivero, publicada en el diario El País (domingo, 13 de julio de 2008):


[...] Coautores

En mis tiempos de editor, que a veces me parecen anteriores a la deriva de los continentes, no se solía trocear la traducción de una misma novela encargándosela a tres personas: se daba por hecho que un texto unitario traducido por un solo individuo tenía más posibilidades de respetar las peculiaridades del original. Hoy los tiempos han cambiado, y, al parecer, la prisa o la codicia han hecho obsoleta aquella norma no escrita. Me he encontrado con un ejemplo de ello en una novela publicada recientemente por Seix Barral, un sello prestigioso. Pero es algo que ocurre con cierta frecuencia. Siempre he considerado que el buen traductor es el coautor del libro en la lengua de llegada, lo que conlleva dos enormes responsabilidades: la del propio traductor y la del editor que lo contrata. En este país contamos con excelentes traductores, pero el intrusismo y la hipertrofia de la oferta han producido cierta trivialización del oficio entre los menos escrupulosos de ambas partes. Salvo excepciones, el salario de los traductores ha permanecido próximo a la congelación en las últimas dos décadas: las tarifas que algunos editores ofrecen a los traductores de inglés o francés no están muy lejos de las que se pagaban en la década de los noventa. Claro que si un buen traductor rechaza aceptar sueldos de miseria o ridículos derechos de traducción, el editor oportunista levanta la correspondiente piedra y -¡sapristi!- aparece una docena de aficionados dispuestos a decir que sí a esas mismas condiciones con tan desbordante entusiasmo como (en general) escasa competencia. Por eso uno se encuentra a veces con traducciones que venga Dios y las lea (y que nadie en la editorial se ha tomado la molestia de revisar). El darwinismo del mercado editorial ha provocado que los traductores sean, de todos los profesionales de la cadena del libro, los que menos han disfrutado del crecimiento de la tarta en años pasados: incluso algunos de los mejores han terminado desertando, cansados de esperar reconocimiento tangible para su trabajo. Recuerdo que una excelente traductora de Henry James me decía hace tiempo que ganaba más traduciendo un folleto para una multinacional que una novela de mediana extensión para una editorial importante. Todo lo anterior viene un poco a trasmano, aunque esté relacionado con dos recientes libros que he manejado estos días y que no deberían faltar en el fondo de biblioteca de todo buen traductor: Decir casi lo mismo, de Umberto Eco (Lumen, traducción de Helena Lozano), que recoge diversos textos del semiólogo italiano en torno a "la experiencia de la traducción", y La traducción de la A a la Z (Berenice), un interesante glosario recopilado por Vicente Fernández González, un profesional que enseña y reflexiona sobre un oficio al que usted, improbable lector/a, y yo debemos momentos inolvidables. [...]

miércoles, 9 de julio de 2008

POURQUOI APPRENDRE LE FRANÇAIS ?

Ayer, en un curso que estoy realizando, otro profesor me dijo sorprendido: "¡Vaya, profesora de francés!" Y se me miró de arriba abajo como si yo fuera una especie en extinción. Lo cierto es que me sorprende ver lo poco que se fomenta en los centros de secundaria de Cataluña el aprendizaje del francés como lengua extranjera, y más aún cuando tenemos Francia, como aquel que dice, "a la vuelta de la esquina". Aunque catalana de adopción, soy oscense de nacimiento. Y os puedo asegurar que, en Aragón, al menos en la parte de Huesca, el francés tiene una presencia muy importante en los institutos. Pero bueno, de este asunto trataré otro día.

Volvamos al tema que nos ocupaba hoy. Decía: ¿Y por qué aprender francés? Pues por muchas razones. Pero dejad que sean otras personas las que os expongan unos cuantos motivos para estudiar francés, ya sea como primera, segunda o tercera lengua extranjera. ¿Os animáis?


domingo, 6 de julio de 2008

SENTIMIENTOS

He aquí una canción cuyo título resume, en una palabra, lo que he sentido estos meses en esta nueva etapa de mi vida. Ideal para subir la moral en momentos de bajón, que obviamente haberlos, haylos.




A quienes no hayáis visto nunca un espectáculo del Cirque du Soleil... ¿qué deciros? Es un espectáculo de luz, sonido, vestuario, maquillaje, números acrobáticos y magia sin igual. ¡Que disfrutéis del vídeo!

UNA PROFE AÚN EN PAÑALES



Mi experiencia como profesora de francés en un instituto de secundaria apenas empezó seis meses atrás, vamos, ¡¡¡que todavía estoy en pañales!!! Afronté mi primer día de clase, como profesora sustituta, con una especie de miedo escénico (¡y es que no llegar a 1,55 m y que la mayoría de los alumnos te saquen dos cabezas a veces impone!), pero con una tremenda ilusión. A los dos minutos de estar delante de los chavales, me sentí como pez en el agua. Estaba saciando el gusanillo que tenía, les estaba enseñando, pero ya desde el primer momento estuve aprendiendo con ellos. ¡Ese intercambio de conocimientos y sentimientos me hizo sentir tan bien!

Sé de sobra que aún me queda mucho camino por recorrer y mucho por aprender. Sé que algunos días me reiré con los alumnos, pero otros harán que incluso se me salten las lágrimas. Cada día es diferente, cada jornada que tienes ante ti un nuevo reto... Eso precisamente es lo que buscaba cuando, después de diez años, dejé atrás las cuatro paredes de mi casa y la única compañía del ordenador. ¡Sabía donde me metía... aunque algunos piensen que sea en la boca del lobo!

viernes, 4 de julio de 2008

LE COUP DE FOUDRE

¡¡Un flechazo, sí señor!! HeartEso es lo que sentí por el francés (me refiero al idioma, claro está) el día que recibí mi primera clase, de eso hace ya más de veinte años. Ese día, lo recuerdo perfectamente, supe que "de mayor" quería ser algo relacionado con esta lengua. Más tarde empecé a estudiar inglés (fui de las últimas generaciones en que aún no se impartía en la primaria), pero jamás sentí por este idioma la atracción que sentí por el francés.

Tras estudiar la carrera de Traducción e Interpretación (conste que lo de la "interpretación" nada tiene que ver con el mundo de la farándula como a veces me han sugerido), empecé a ejercer como traductora autónoma en mi casa. Tras diez años en los que muchos días mi único contacto con la humanidad fue a través del teléfono e Internet, necesitada del contacto "cara a cara" con la gente, decidí hacer un giro radical en mi vida: de la soledad más absoluta pasé a impartir clases de francés en secundaria, rodeada de un sinfín de bulliciosos adolescentes. ¡Se acabó lo de la monotonía y el silencio! ¡Algunos amigos me trataron de suicida! Pero el cambio no llegó a ser de 180°, pues, como bien podéis imaginar, mi pasión por el francés, "de mayor", sigue ahí.